¿Qué es un Sprint?
Imagina el Sprint como la coreografía de un espectáculo: ¡es la pieza central que marca el ritmo del equipo en el escenario Scrum! Es como el latido que mantiene viva la energía del equipo.El Sprint es como un ensayo programado, un periodo de menos de un mes en el que el equipo tiene la misión de presentar un acto terminado y listo para brillar ante el público, es decir, un valor que pueda ser desplegado. Queremos producir algo que resuene, aunque la decisión final de qué pasa al escenario depende del Product Owner. Aun si el Product Owner dice que no habrá cambios, el equipo sigue siendo responsable de dejar todo listo para dar el siguiente paso, ya que dejar pendientes acumula problemas.
Los Sprints tienen una duración definida que se ajusta a las necesidades del negocio. Cuanto más corto sea, mejor para ajustar y adaptar nuestro espectáculo. A veces, en algunos casos, se necesita más tiempo para construir algo que realmente sorprenda.
¿Cuánto dura un Sprint?
La mayoría de los equipos se plantean Sprints por semanas; esto a menudo genera un dilema: ¿semanas laborales o días naturales? Si elegimos laborales, puede ser más seguro, pero corremos el riesgo de olvidar el día en que empezamos; además, los viernes suelen ser más relajados en muchas empresas, lo que puede afectar el tiempo disponible. Si optamos por días naturales, algunos Sprints pueden verse afectados por días festivos. Decidir juntos es clave, no te obsesiones con la perfección, no hay una respuesta única.Un error importante sería cambiar la duración de un Sprint a mitad de la actuación. Eso echaría por tierra el trabajo que invertimos en planificar, nos privaría de datos valiosos sobre lo que podemos lograr y podría llevarnos al caos.
El Sprint empieza justo después de que termina el anterior. No hay pausa ni tiempo de espera. Para empezar un nuevo Sprint, es crucial afinar cada detalle.
¿Y cuál es el objetivo del Sprint?
Cada Sprint tiene un objetivo clave: el Sprint Goal. Es algo que se decide al comienzo y no debe cambiarse. Este objetivo marca el avance que queremos para nuestro espectáculo. Además del Sprint Goal, el equipo hace una previsión del alcance (el conjunto de cosas por hacer) para el Sprint. Aunque al principio me decían que esto era inamovible, resulta que, al ser una previsión (no un compromiso), es totalmente renegociable. Los cambios son normales y permiten que la magia suceda.Los Sprints terminan de dos maneras: por tiempo agotado o por decisión de cancelación, que rara vez sucede. Si se cancela, se acepta lo que se haya hecho y se prepara un nuevo acto.
Mantener la calidad durante el Sprint es esencial, es como mantener el tono durante todo el show. Reducir nuestra meta de calidad solo nos engañará y nos hará perder confianza.
Así es el Sprint, el verdadero ritmo del equipo. Puede parecer fácil trabajar así, pero muchos equipos que abandonan Scrum eliminan estas etapas pensando que serán más rápidos. Pero la agilidad no solo es velocidad, también es detenerse, reflexionar y mejorar. Inspeccionar y adaptar es clave, y trabajar en lapsos definidos ayuda a mantener el ritmo. ¿Y tú, qué ritmo llevas?
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